Hoy en día si no estás “conectado” no formas parte de la sociedad. Partiendo de este supuesto, admitimos que todo el mundo tiene televisión, lee el periódico, escucha la radio y más exageradamente la sociedad comprendida entre 14 y 40 años utiliza Internet y usa todo tipo de aparatos de última tecnología. A través de todos estos medios de comunicación les llega un bombardeo de mensajes, información, opiniones que influyen en el comportamiento y en el pensamiento de esta sociedad “conectada”.
A través de la teoría del conflicto podemos cuestionarnos: ¿Cómo es posible que la mayoría de la gente tenga el mismo “pensamiento” (con pensamiento no me refiero a la misma opinión, sino a determinar qué está bien visto y qué no) y a causa de ellos siga las mismas normas, modelos, ejemplos, y conductas de vida?
La sociedad se mantiene unida por esto mismo. Los medios de comunicación ocupan el lugar de los grupos de poder para proclamar qué “pensamiento” ha de tener la sociedad y también de forma egoísta el “pensamiento” que mejor les conviene a ellos que tenga la sociedad, véase el capitalismo por ejemplo. Por otro lado, también hay tantos grupos de interés solapado y dividido (por ejemplo distintas cadenas, distintas marcas de un producto, distintas opiniones políticas) que los individuos deben aprender a cooperar y a tomar decisiones “libres” en su medida. (Con “libres” me refiero a que no puede ser muy libre cuando sólo te dejan escoger blanco o negro sin enseñarte el rojo o el verde) La publicidad nace en ese contexto de sociedad, que ven los teóricos del conflicto, en el que varios grupos con diferentes intereses interactúan y compiten. Ésta nos ayuda a elegir del muestrario que nos ofrecen.
Después de esta reflexión, opino que los medios de comunicación reflejan o quieren reflejar a una sociedad egoísta, cómoda, que desea que lo se den todo rápido y sin ningún esfuerzo. Como mucho los valores que más están poniendo de moda son las motivaciones ecológicas por un mundo “sano”, la lucha en contra la violencia de género y poco más. Por otro lado, las actitudes más negativas podrían ser los estereotipos que a través de sus series de televisión, películas, y anuncios están formando en la sociedad que desemboca en anorexia, bulimia, bajada de autoestima por no tener un buen sueldo, el mejor coche y la pareja perfecta. Sin duda, el reflejo que da de las aspiraciones sociales (un coche deportivo, una casa grande, un cuerpo de infarto etc..) es bastante coherente, pero solo por el simple hecho de que ellos son los que han creado esas “necesidades” en las mente de la sociedad y por lo tanto es el camino que ésta esta siguiente sin mirar a ningún lado más.
Simplemente espero, que en un futuro las cosas cambien y las nuevas generaciones piensen por sí mismas y no se dejen llevar tanto por los medios de comunicación, o que los mismo medios de comunicaciones se den cuenta del desastre de sociedad que pueden llegar a crear.
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